Las condiciones en las que los empleados desarrollan su actividad profesional repercute de forma directa en su satisfacción, su motivación y, como consecuencia de ello, en su productividad.

Tanto es así que cada vez son más las pequeñas y medianas empresas que, copiando lo que vienen haciendo las grandes desde hace un tiempo, se toman muy en serio la creación de un ambiente laboral que maximice los niveles de productividad de sus trabajadores.

Un objetivo que requiere del diseño de una estrategia que garantice la existencia de un clima de trabajo respetuoso, dinámico y colaborativo como base fundamental para que la organización vaya alcanzando, uno a uno, todos los objetivos que se vaya marcando.

Cómo crear un ambiente laboral que mejore la productividad de la empresa

1- Establece una cultura de productividad

Para ello:

  • Marca objetivos realistas y comunícalos puntualmente y de forma clara a tus trabajadores.
  • Fija objetivos por equipos o de forma individualizada.
  • Ofrece todas las herramientas necesarias para que los trabajadores puedan desarrollar su actividad de forma cómoda y eficaz.
  • Crea documentos colaborativos que permitan comunicar a los empleados sus propuestas e ideas y hazles ver, implementando todo aquello que pueda mejorar el clima laboral, que les tienes muy en cuenta.

2- Crea calendarios de tareas

Un buen calendario debe:

  • Reducir al máximo la cantidad de tareas de cada trabajador (a menor estrés, mayor productividad).
  • Tener en cuenta las capacidades de los trabajadores y de los distintos equipos de trabajo.
  • Incluir todos los periodos de descanso que se deben respetar durante la jornada, en las tareas que se llevan a cabo fuera del espacio de trabajo y entre reuniones.
  • No modificarse constantemente como consecuencia de ‘últimas horas’.
  • Ser lo más colaborativo posible en busca de la mejor conciliación laboral y familiar de la plantilla.

3- Rediseña el espacio de trabajo

Enfócate en que este:

  • Disponga de la máxima luz natural posible y de zonas de descanso.
  • Tenga siempre una temperatura suave que oscile entre los 23º y los 25º.
  • Permita la personalización de las zonas de trabajo individuales para acomodarlos a su gusto.

4- Presta una especial atención al orden y la limpieza

El orden y la limpieza en la oficina son imprescindibles para:

  • Garantizar que los trabajadores desarrollen su actividad en las mejores condiciones de higiene.
  • Permitir que los empleados encuentren aquello que necesitan para desarrollar su actividad.
  • Evitar pérdidas de tiempo a lo largo de las jornadas de trabajo.
  • Conseguir que los trabajadores puedan ordenar su mente para llevar a cabo las tareas programadas para cada día.

En resumen, un ambiente limpio y ordenado en el trabajo mejora los niveles de productividad de la plantilla, y aumenta su bienestar laboral.

5- Elimina posibles distracciones

Evita en la medida de lo posible:

  • Las reuniones largas y continuas.
  • Las reuniones con demasiadas personas.
  • Las llamadas que tienen lugar frente a otros empleados
  • El acceso a las redes sociales desde los dispositivos con conexión a internet de la empresa.
  • La burocracia entre departamentos y para con los proveedores.

6- Evita controlarlo todo

Es imprescindible que tengas en cuenta que:

  • Es necesario delegar responsabilidades en cargos intermedios.
  • Es importante permitir que los empleados lleven a cabo las tareas ‘a su manera’ y de forma creativa respetando ciertos márgenes, siempre que las entreguen en tiempo y forma.
  • Obsesionarte con cada pequeño asunto te generará estrés a ti y al resto de personas que trabajan contigo.

7- Hazles ver lo importantes que son para la empresa

  • Muéstrate agradecido por el trabajo que hacen todos tus empleados.
  • Reconoce sus logros personal y públicamente.
  • Valóralos profesional y económicamente.
  • Celebra el trabajo bien hecho con todo el equipo cada vez que se cumplan objetivos a través de comidas o cenas dentro y fuera de la empresa.

8- Pon en marcha programas de aprendizaje y desarrollo

La implementación de talleres y cursos enfocados al aprendizaje y desarrollo de los trabajadores resulta esencial para:

  • Ampliar, refrescar y actualizar sus conocimientos.
  • Aumentar el número de competencias de cada empleado.
  • Favorecer la promoción de los trabajadores.
  • Facilitar la reconversión profesional y el trasvase entre departamentos dentro de la compañía.
  • Fomentar el crecimiento personal y profesional de la plantilla.
  • Maximizar las capacidades y posibilidades de cada integrante de la organización.

9- Sé positivo

Ya que transmitir positividad repercute:

  • En los niveles de motivación y felicidad de los trabajadores.
  • En sus niveles de adhesión al proyecto de la plantilla.
  • En la retención y atracción de talento de tu empresa.
  • En la tasa de productividad global de la compañía.

10- Encárgate de la mejora continua del ambiente laboral

No solo vale con diseñar y poner en marcha un conjunto de estrategias encaminadas a crear el mejor ambiente laboral posible.

Resulta aún más importante si cabe poner todos los medios necesarios para garantizar la mejora continua del clima laboral.

Algo que deberás supervisar personalmente, ya que solo así podrás estar seguro de que tus trabajadores están en condiciones de ofrecer su mejor versión y, así, ayudar a tu empresa a conseguir todos y cada uno de vuestros objetivos.